Oriundo del Paraje Altamira, San Carlos, y de San Pablo, Tunuyán, ambos del Valle de Uco, Mendoza, estamos ante una etiqueta 100% Bonarda.
Vino fresco y de gran equilibrio. La particular combinación de la alta insolación con bajas temperaturas le permite a la vid madurar sostenidamente y mantener intacta la acidez natural. Estas condiciones dan lugar a vinos elegantes, finos y complejos.